Hay algunas cosas que eran bastante increíbles antes de que apareciera el jengibre. Piensa en cerveza. O pan. O Gilligan. Pero admítelo: la versión jengibre de cada uno es bastante superior. Entonces, cuando consideraron lo que la pequeña raíz picante podría hacer por la zanahoria, un alimento básico que se mantiene por sí solo pero que no exactamente baila sobre la mesa, nos mareamos un poco. El resultado fue tan elevado que tuvimos que embotellarlo. Porque tu salteado es fantástico, pero...
Ingredientes:
Agua, zanahorias, vinagre de manzana, almidón de tapioca, pasta de tahini (semillas de sésamo molidas), sal marina, aceite de oliva virgen extra, jengibre, chalotes, goma xantana, pimienta negra, ajo en polvo, cebolla en polvo.
